jueves, 27 de marzo de 2014

Nymphomaniac Vol. I y II


Acabo de ver Nymphomaniac Vol. I y II de un solo coñazo para salir de ese peo, la nueva y controversial película del nazi Lars von Trier, protagonizada por su musa,  la británica Charlotte Gainsbourg. Una historia que como su nombre lo indica, se basa en la vida de una ninfómana llamada Joe, la ninfomanía es una adicción al sexo, unas ganas insaciables de tirar con Raymundo y todo el mundo  que padecen algunas mujeres. El film se basa en una conversación que tiene la birrionda de Joe con un viejo (Que es libro gordo de Petete), donde la chama le cuenta la historia de su peo sexual desde el principio al final con lujo de detalles.




El largometraje se divide en dos volúmenes, los cuales en conjunto constan de ocho capítulos, en donde Joe va narrando la evolución de su adicción. La película maneja varias líneas de tiempo porque cada vez que la tipa echa una anécdota, las imágenes se trasladan al momento exacto y luego vuelven al presente para que el viejo de una opinión bien fundamentada y culta de lo que le está contando la otra.  Un drama con un pelo de porno explicito que mezcla el sexo con todo lo que se puedan imaginar, algo que era de esperarse porque el guión fue escrito por el  mismo Lars von Trier y ese bicho está medio tostón. En términos generales el guión es normalito, aunque demasiado rebuscado en algunas ocasiones.

No te me había la necesidad de dividir esta película en dos volúmenes, qué ganas de joder. En una sola podían contar la historia completa sin necesidad de extenderse tanto.



Con respecto a las actuaciones Charlotte Gainsbourg no fue la gran vaina, siento que tiene anemia en todas las películas en las que trabaja con este director. Stacy Martin, la chamita que debutó como actriz interpretando a Joe en la adolescencia, casi me saca la piedra por haber tenido la misma expresión clavada en la cara durante toda su participación, supongo que así era el personaje pero que pereza (ZZzzzzZZzzzZZZzzzz). El "I AM NOT FAMOUS ANYMORE" también conocido como Shia LaBeouf, hizo una actuación ahí-ahí y la cagó con su acento británico, el cual fue mierda. En cambio, Uma Thurman sí se la comió, a pesar de aparecer en un solo capitulo (Mrs. H) y Christian Slater también se metió deep en el papel y medio salvó la patria haciendo del  amoroso y comprensivo  padre de Joe.





Como todo el cuento se trata de sexo, obviamente hay escenas fuertes de esto  y claramente la película resulta no ser apta para todo público porque a Von Trier le dio la gana de ser bien boleta (aunque supuestamente hay una versión suave). Yo juraba que las escenas de penetración habían sido realizadas por los mismos actores, pero resulta que en Wikipedia dice lo siguiente: “Para lograr las escenas de sexo no simulado, Von Trier compuso digitalmente los genitales de actores pornográficos en los cuerpos del reparto de su película” so… Bueno, igualito en estas escenas la dirección de fotografía se afincó en los planos detalles para no dejar nada a la imaginación, y bueno también resaltaron (además de la tiradera) hermosos paisajes naturales con planos generales bien chéveres.





En esta película relacionan la intensidad sexual de la muchacha con naturaleza, animales, matemáticas, literatura, música, historia y religión, mientras van mostrando imágenes que argumentan el parecido. Otros aspectos relevantes son los diferentes filtros de color que utilizan en algunas escenas, incluyendo hasta una secuencia en B/N y el soundtrack que va desde Rammstein hasta música clásica.





Honestamente creo que la película no lo logra del todo, a mí me dio ladilla en varias partes, yo tenía demasiadas expectativas de esto y no fue lo que me esperaba (Con decirte que hice un recreo y todo, la pausé un rato y me fui a lavar los platos ¡Échale bolas!). De igual forma creo que es una producción que hay que ver, pero pa’ la próxima vaina de Lars von Trier no me emociono tanto.

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